martes, 25 de enero de 2011

SIN TÍTULO.

Y así es el miedo, sedoso, silencioso, hábil.

El respeto recíproco va creciendo conforme avanzabas a tu ducha, mientras yo me secaba la boca, aún húmeda de tu sudor corporal.
Tanto ensañamiento con la diversión,puede que se nos olvidara querer.
Desearnos fue el obstaculo, olvidarnos, solo invisible.

No me llamabas, yo no te dejaba de mirar a escondidas, releyendo una y otra vez tu argumento.

La escusa, el rascarte, el perder tus bragas.
Sin más, humos de memoria quemada.
¿Y que pasa con esto?
Eso que nunca hemos tenido, y que nunca controlamos, lo que ni tu cuidas, ni lo que yo suelto.
¿Qué pasa?
Supongo que solo habrá otra noche, en la que nos encontremos, y nos volquemos de nuevo en carícias.
Todo nos llevará a lo mismo, yo enloqueceré, tu desaparecerás, dejandote un "posit" en mi cama, que diga lo bien que lo has pasado, luego yo me hundiré, me reforzaré en la música, y si eso...una que otra noche embriagada.
Pero claro...
Para qué pensar que volverá a ocurrir mañana... si aún no he logrado descifrar, que significa tu mirada.

Se que me miras, que te gusto, y que te callas.

O quedate, o vete, pero no me marees con tu jueguecito de escondite, porque yo tengo algo más importante que hacer, o como mínimo, comerte el cuello hasta marcarte, para cada vez que te mires al espejo, al menos me recuerdes, como lo que tu quieras recordarme.
Yo el placer lo aparto, y ahora, me prometo pararte, preguntarte el porqué.
Y si mi valor me da el empujoncito, te devolveré yo el beso.

Pero cuidado, porque puede que no te suelte nunca.

Si todo va bien, tu me pegarás esa bofetada de sinceridad que tanto llevo esperando, y ya sí, por fin, la espiral se saldrá del papel, y me atará a tu cama.

De ahí no te me escapas.

Eso tenlo por seguro....aunque claro...
¿Y si te despiertas orgullosa?...Y lo peor de todo....¿Y si me vuelvo a enamorar de tu fachada?

Entonces esto no tendría ningun sentido, y lo único que estaría haciendo sería intentar pasar una noche más, en la que estás en mi cabeza, y en la que pienso que no te voy a tener más, a pesar de que los dos queramos y nuestro cuerpo lo pida a gritos.

Otra vez...¡Qué pollas!

0 Gritos de libertad:

Publicar un comentario

Grita, eres libre de expresar lo que quieras.